En un histórico desfile de moda en La Habana, Cuba, Karl Lagerfeld logró multiplicar el mensaje de libertad y apertura que se vive en esta faceta de la polémica isla. Chanel Cruise 2016/17 celebra el color, sabor y la riqueza cultural del revolucionario país que durante decenas de años cerró sus puertas a diversas industrias, entre ellas a las de moda y lujo.

Con la frase “¡Viva Coco! Cuba Libre”, el Paseo del Prado de La Habana, construido en 1772, fue el escenario del primer desfile de la casa de moda Chanel en Latinoamérica. No hizo falta agregar ningún elemento ornamental para vestir la pasarela, aún cuando la marca es conocida por sus majestuosas e impactantes construcciones de escenarios, ya que por si solo el paseo de mármol era ya un marco mágico y único para la ocasión.

Entre los asistentes al desfile se encontraron figuras como el nieto de Fidel Castro, quien podría incursionar en las pasarelas, Tony Castro, Gisele Bundchen, Tilda Swinton, Omara Portuondo, Vanessa Paradis, y Vin Diesel, quien por cierto se prepara para la grabación de la nueva entrega de The Fast and The Furious, que se grabará en Cuba, rompiendo más de las antiguas restricciones de la Cuba socialista.

La colección Chanel Cruise está fuertemente inspirada en la isla, siluetas masculinas para looks femeninos, los icónicos Panama hats, la aparición de berets inspirados en el Che Guevara, zapatos flat a dos tonos, motivos caribeños, prints con la imagen de los clásicos coches antiguos conocidos como almendrones y la elegancia del dandy cubano de los años cincuentas, con un puro en mano y lo galante del hombre latino.

Si bien el pueblo cubano esta lejos de tener una boutique de la marca, o sea el lujo una de sus prioridades, es plausible el impacto económico que la casa de moda francesa ha generado antes, durante y los días consiguientes de este desfile, que sin lugar a dudas quedará marcado en la historia como uno de lo más destacables para Chanel.


In a historical fashion show in Havana, Cuba, Karl Lagerfeld managed to multiply the message of freedom and openness that exists in this facet of the famous island. Chanel Cruise 2016/17 celebrates the color, taste, sound and cultural richness of the revolutionary country that for decades closed its doors to various industries, including the fashion and luxury industry

With the phrase “Viva Coco! Free Cuba”, Paseo del Prado in Havana, built in 1772, hosted the first runway of Chanel fashion house in Latin America. No additional decorative elements to dress the catwalk were needed, even when the brand is known for its majestic and impressive stages, since the marble walk alone was already a magical and unique setting for the occasion.

Among those attending the show, figures as the grandson of Fidel Castro, who might become a model himself, Tony Castro, Gisele Bundchen, Tilda Swinton, Omara Portuondo, Vanessa Paradis, and Vin Diesel, who is preparing for the new installment of the Fast and the Furious, which will be recorded in Cuba, breaking most of the old restrictions of socialist Cuba.

The Chanel Cruise collection is heavily inspired by the island, masculine silhouettes for feminine looks, iconic Panama hats, the appearance of berets inspired by Che Guevara, two-tone flat shoes, Caribbean motifs, prints with the popular vintage cars known as almendrones and the elegance of the Cuban dandy of the fifties, with a cigar in hand and the characteristic gallantry of the latin men.

While cubans are far from having a Chanel boutique in their city, nor they consider luxury a priority, it is plausible the positive economic impact that the French fashion house has created for the island, and without doubt, this show will be marked in history as one of the most remarkable for Chanel.

[gwsc_youtube url=”https://www.youtube.com/watch?v=o6PEVrQNk4w” height=”400″]

[galleon_gallery id=”6467″]

Text /Hector Penunuri